Actualmente el sector del transporte se está enfrentando a un problema estructural que se va a ir agravando a medida que pase el tiempo, “la falta de conductores de camión”. Desde TDRJOBS invitamos a profesionales del sector del transporte para que expusieran su punto de vista acerca del problema de la escasez de conductores y sus posibles soluciones. La mesa estuvo moderada por Carlos Sánchez de Transportes XXI y sus participantes fueron: Laura Vega, responsable de RRHH de TGF, Ismael Carrón, responsable de la plataforma CAP en CNAE y Jorge Somoza, director general de CETM Madrid.
Carlos Sánchez, de Transporte XXI, introducía a los ponentes compartiendo unos datos alarmantes del sector. “Nos enfrentamos a un problema estructural, a nivel no solo de España sino de Europa y EE.UU. En el mundo faltan 2,6 millones de conductores profesionales, y en concreto en Europa medio millón, al cierre del presente año”.
La media de edad de los conductores es de 52 años y solo una cuarta parte tienen menos de 50, “se van a jubilar más conductores de los que van a entrar”. Según expertos del sector, en unos 10 o 15 años vamos a vivir una situación dramática puesto que el transporte se va a incrementar un 60%.
Otra variante para tener en cuenta es la incorporación de las mujeres en el sector. Actualmente representan un 2% solamente, por más que se promueve, no se llega al público femenino y hay que incrementar este punto y favorecer la inclusión de las mujeres en el ámbito nacional.
Jorge Somoza, director general de CETM Madrid, cree que el problema se resume en la siguiente pregunta: ¿A quién de nosotros le gustaría que nuestro hijo/a fuera conductor? La respuesta en más de un 90% es negativa, es decir, no conseguimos que esta profesión sea atractiva para jóvenes, mujeres e incluso desempleados.
Al mismo tiempo mantiene que existen 3 factores determinantes que influyen a la hora de ser conductor, el acceso a la profesión (entre 3.000 y 5.000€ aproximadamente para obtener el permiso de conducir y el CAP), las condiciones de la profesión (conciliación familiar, el desarraigo, las propias condiciones duras, etc.) y la imagen y dignificación de la profesión.
Según Laura Vega, responsable de RRHH de TGF, el transporte de mercancías por carretera siempre ha sido un sector maltratado, aunque gracias a la crisis sanitaria se le ha otorgado más valor, al poder tener ese alcance en almacenes, tiendas etc. El principal problema que vemos en nuestra empresa es la falta de relevo generacional. Vega señala también que hay que tener en cuenta la proyección y evolución, ya que el conocimiento tecnológico de los conductores debe ir a la par de la proyección tecnológica del sector, “además de formación experimentada, debe empezar a exigirse formación tecnológica”.
Ismael Carrón, responsable de la plataforma CAP en CNAE, afirma que el problema está en las condiciones laborales, la imagen de la profesión, y el acceso en cuanto a cuestiones económicas, principalmente. “En 2009 el SEPE decidió dejar de subvencionar los permisos de conducción, por lo que el número de conductores cayó en picado”. “Hay que incentivar la formación profesional, si alguien tiene esa vocación, facilitar esa vía a través de acuerdos con empresas, realizando horas de prácticas y homologación de los permisos. Se necesitan ayudas y financiación para ello”.
Los tres profesionales coincidieron en que se tienen que aplicar varios cambios a nivel general que aplicados de forma conjunta pueden minimizar el problema de falta de conductores.
Uno de los planteamientos para ayudar a solucionar el problema a corto plazo es que se tomen medidas de flexibilidad, ampliando convenios con otros países, o incluir ese puesto en ocupaciones de difícil cobertura, según afirma Jorge Somoza. Facilitar la contratación en origen del propio conductor para ayudar así también al problema de la emigración ilegal.
Respecto a las condiciones del conductor, se están tomando medidas muy importantes, e incluso históricas, como es el caso de la aprobación de la prohibición de carga y descarga, una buena noticia que ayudará a conciliar y dar más seguridad a los profesionales del sector. Ya que, los tiempos de espera y las labores de carga y descarga, son dos de los aspectos más negativos que percibían los conductores de su profesión. También, se están haciendo estudios, para reducir tiempos de espera, mejoras en áreas de descanso, aspectos que se consideran muy importante para el conductor.
La tendencia tecnológica debería también ayudar a sincronizar mejor los tiempos y la jornada laboral; hoy en día el poder conectarte fácilmente por internet es una mejora importantísima. Las mejoras tecnológicas nos harán ser más eficaces en horas de llegadas, reducción de tiempos de carga y descarga, entre otros aspectos.
Para concluir, Jorge Somoza realizó una reflexión poniendo en valor el sector a nivel general. “Hay que aclarar la situación y las posibles soluciones. Somos un sector esencial, queremos transmitir una imagen de trabajo y esfuerzo. Transportamos medicamentos, transportamos salud, transportamos juguetes, transportamos alimentos, transportamos comida. Sin nuestra labor, nada sería lo mismo”.